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En Antioquia se han realizado encuentros de reconciliación en el Bajo Cauca y en el Urabá, en este último, indígenas realizaron un ritual de perdón con exintegrantes Farc – EP.
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En el departamento se han aprobado siete proyectos productivos colectivos, donde la ARN apoya económicamente con 3.152.000.000 millones de pesos
En Antioquia, la Agencia para la Reincorporación y la Normalización (ARN) atiende a 1.357 exintegrantes de las Farc-Ep que viven en los cuatro antiguos Espacios Territoriales de Capacitación y Reincorporación (ETCR), de los cuales, 1.310 se les aplicó el Registro Nacional de Reincorporación.
Gracias a este censo, en estos últimos 6 meses se facilitó la asistencia de los excombatientes a actividades programadas por la entidad como formación académica y para el trabajo.
Así mismo, la reincorporación a la vida civil de los excombatientes de las Farc-Ep también comprende un trabajo de tejido social en los territorios, de convivencia y reconciliación entre quienes habitan el mismo espacio.
Los facilitadores de la ARN, la academia e incluso los mismos excombatientes gestionan espacios para velar que en el Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y No Repetición se haga efectivo con las personas que hacen su tránsito a la vida civil.
Muestra de ello, gracias a la articulación institucional de la ARN, la asociación Caminos de Esperanza Madres de La Candelaria y los exintegrantes Farc-Ep que residen en Antioquia se encontraron en un espacio académico que les permitió conocer el rostro de quienes por años han esperado noticias de sus seres familiares.
Caminos de Esperanza Madres de La Candelaria es un movimiento social que nació en 1999 por iniciativa de Teresita Gaviria, a raíz del asesinato de su padre y la desaparición de su hijo; además, es un colectivo de mujeres víctimas de desaparición forzada, asesinatos y desplazamientos que hoy construyen experiencias de memoria, paz y perdón en Medellín.
Ellas, un grupo de 40 mujeres de las 896 que la conforman, se encontraron frente a frente con exintegrantes Farc-Ep en un conversatorio que más que palabras, desarmó corazones y dejó un mensaje de construcción de paz en el territorio antioqueño.
"Cuando, estábamos en el monte, veíamos a todos como enemigos y por eso nos enfrentábamos, pero
cuando uno conoce el rostro del contrario, ubica el conflicto y la intensidad del mismo comienza a bajar", indicó Marcos Urbano, exintegrante Farc-Ep
El encuentro entre víctimas y victimarios es la muestra de que la construcción de paz en el país, es la suma de voluntades de quienes han vivido la violencia de manera directa y la capacidad de resiliencia ante episodios dolorosos en los que se ven involucrados familiares.
"Hoy es un día muy importante. Vamos a trabajar por la reconciliación, por el perdón y la buena convivencia; no queremos una verdad maquinada, queremos una verdad como la que ustedes están contando aquí", puntualizó Teresita Gaviria.
Como este espacio académico, los exintegrantes de las Farc-Ep adelantan en diferentes subregiones de Antioquia encuentros de reconciliación, especialmente en el Magdalena Medio.
"Estamos respondiendo con cinco casos ante la Justicia Especial para la Paz, ante la Comisión de la Verdad estamos haciendo una radiografía del conflicto en el país, realizamos actos de Reconciliación con todos los actores y hacemos servicio social con el cuidado del medio ambiente sobre todo en el Magdalena Medio", contó Marcos Urbano, exintegrante Farc-EP.
Datos de interés
-Con corte al 31 de enero de 2020-
El encuentro se realizó en el marco de la investigación Terminar la guerra de la Unidad de Paz de la Universidad de Antioquia.
Como parte del Proceso de Reincorporación, la ARN ha acompañado 7 proyectos productivos colectivos y 96 individuales de exintegrantes Farc – EP que le apuestan a la legalidad.