La Agencia para la Reincorporación y la Normalización (ARN), con el
apoyo de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional
(USAID) y de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), fortalece
29 iniciativas comunitarias, con el propósito de contribuir a la convivencia
entre personas en proceso de reintegración y habitantes de las comunidades que
los acogen.
Este
proceso de fortalecimiento se enmarca en el modelo de trabajo comunitario de la
ARN, el cual tiene como objetivo construir
vínculos de confianza entre excombatientes y habitantes de las comunidades
a través de la promoción de espacios de participación, convivencia y
reconciliación, y el fortalecimiento de entornos protectores para niños, niñas,
adolescentes y jóvenes.
Desde 2007, la Estrategia
Comunitaria de la ARN ha realizado 552 intervenciones, beneficiando a 36.881
colombianos en 29 departamentos. En 2019, con el apoyo de USAID y la OIM, se
están fortaleciendo 29 iniciativas
comunitarias, desarrolladas entre los años 2016 y 2018, con el fin de generar entornos protectores y escenarios comunitarios
para la convivencia y la reconciliación.
Estas iniciativas se
encuentran ubicadas en diferentes municipios de los departamentos de Antioquia,
Caquetá, Cauca, Cesar, Caldas, Risaralda, Huila, Meta, Nariño, Tolima, Valle
del Cauca y en la ciudad de Bogotá. A través del fortalecimiento en temas
productivos, de asociatividad, comunicación para el desarrollo, cultura y deporte,
entre otros, buscan aportar a la reconstrucción del tejido social en el
territorio.
Para la ARN, el modelo
de trabajo con comunidades responde a la necesidad de crear espacios de
diálogo, convivencia y reconciliación entre las comunidades receptoras y los excombatientes,
con miras a facilitar su reintegración a la vida civil y social. Con corte a 31
de mayo de 2019, 24.414 excombatientes
han culminado este proceso, mientras 5.724 adelantan su ruta.
“A través de la
Estrategia Comunitaria, desde la ARN tenemos la oportunidad de tejer lazos de
confianza entre excombatientes y habitantes de las comunidades que los acogen; disminuir los niveles de estigmatización; y
fortalecer las capacidades comunitarias”, resalta Andrés Stapper Segrera,
director general de la ARN.
Para OIM y USAID,
vincularse al fortalecimiento de estas iniciativas comunitarias es importante
en tanto aporta a la generación de oportunidades para hombres y mujeres que
hicieron parte de un grupo armado ilegal y que en la actualidad se reintegran a
la vida civil; y a su vez, propicia espacios que los vinculan con las
comunidades, promoviendo escenarios de convivencia y reducción de la
estigmatización.