- 10.394 mujeres han ingresado en los últimos 19 años a los procesos de reintegración, reincorporación y atención diferencial en la ARN.
- 3.966 mujeres hacen parte en este momento de los procesos.
De 12.733 firmantes de paz que actualmente avanzan en su proceso de reincorporación, 3.261 son mujeres y en todos los antiguos ETCR, se encuentran liderazgos que las firmantes de Paz han y siguen erigiendo en pro del acceso y la garantía de derechos de las personas en reincorporación, así como tejiendo caminos para la convivencia y la reconciliación con las comunidades.
En el Día Internacional de la Mujer, la Agencia para la Reincorporación y la Normalización (ARN) conmemora las luchas históricas que desde distintos lugares del mundo, las Mujeres han abanderado, exigido y persistido en el reconocimiento pleno como sujetas de derechos y ciudadanos, especialmente, como mujeres trabajadoras en lo social, lo político, lo económico y del cuidado; este acumulado es una memoria viva que impulsa las agendas sociales de las mujeres, sobre todo en las apuestas por la Paz y la protección de la vida que, sin duda algunas, hace de ellas las protagonistas de la transformación social y de la construcción de Paz en el país. Para este 2023, en el Gobierno del Cambio, el manifiesto es #TodasSomosTrabajadoras destacando ese importante rol que históricamente de a poco ha ganado espacios.
“Estamos trabajando en la Reincorporación política y el empoderamiento de las mujeres. Tenemos la convicción de que las mujeres son un factor de cambio fundamental en la sociedad después de ver lo que hicieron en la guerra, lo que han hecho en la construcción de la paz, lo que las mujeres firmantes han hecho luego de dejar las armas para construir reconciliación", explica Alejandra Miller, directora general de la Agencia para la Reincorporación y la Normalización – ARN.
En este momento hacen parte del proceso de Reincorporación 12.843 personas, de las cuales 3.264 son mujeres (25%) y el 78% de ellas son jefes de hogar. La ARN habla de mujeres en plural porque entiende que existen diferentes formas de ser mujer en un contexto de pluralidad en el que hacen parte las mujeres indígenas, afrocolombianas, negras, raizales y palenqueras, jóvenes, adultas, adultas mayores, mujeres con discapacidad, mujeres lesbianas y bisexuales, transgénero, mujeres campesinas, víctimas y en proceso de reincorporación.
“El querer ayudar a la comunidad, trabajar en la junta de acción comunal, ser concejal, ser alcaldesa, también genera un arraigo y menos tentaciones de irse del proceso. Ahí la agencia estaba en ceros y estamos revisando cómo vamos a trabajar para que conozcan temas asociados en liderazgo social, político, comunitario, al conocimiento del Estado para promover la participación social y política", puntualiza Alejandra Miller, directora general de la ARN.
La ARN es la encargada de desarrollar el punto 3.2 del Acuerdo Final, el cual hace referencia a la reincorporación social y económica de las personas exintegrantes de las Farc-Ep. La reincorporación debe ser un proceso integral con un enfoque diferencial en todos sus componentes y con un énfasis en los derechos de las mujeres.
El documento CONPES 3931 de 2018, resultado de un trabajo coordinado y concertado entre diferentes entidades e instituciones, plasma 18 acciones de género que apuntan a la inclusión del enfoque diferencial en todos los planes, programas y proyectos que se desarrollen en torno al proceso de reincorporación.
Una de esas acciones se refiere al diseño e implementación de estrategias que impulsen la autonomía económica de las mujeres, garantizando su acceso, control y administración de recursos. Por ello, la Agencia seguirá impulsando la transversalización del enfoque del género en la Reincorporación Económica y aunará esfuerzos a través de acciones afirmativas que propendan por generar condiciones de sostenibilidad de los proyectos económicos de las mujeres, al igual que la configuración de alianzas publica-privadas para la vinculación laboral de las firmantes de paz.
Dentro de las apuestas y el compromiso de la Agencia se encuentra tener presentes las cargas de cuidado y avanzar hacia la redistribución de estas para que las mujeres puedan desarrollar sus liderazgos sociales y políticos, además de sus proyectos comunitarios y económicas desde una mirada integral que reduzca el trabajo no remunerado del cuidado a partir de los contextos territoriales.
La construcción de Paz pasa por brindar garantías de vida digna para las mujeres que desde una decisión política decidieron aportar con la firma del Acuerdo Final de Paz y sumar al trabajo territorial de reconstrucción del Tejido Social. Es compromiso de la Agencia es alinear sus esfuerzos institucionales para poner en el centro de su quehacer, el empoderamiento de las mujeres firmantes de Paz.