Desde la Agencia para la Reincorporación y la Normalización (ARN), la Unidad para las Víctimas y la Unidad para la Implementación del Acuerdo de Paz rechazamos las declaraciones del diputado del Tolima Juan Guillermo Beltrán en contra de la reubicación de familias víctimas del conflicto armado, entre ellas firmantes de paz que serán trasladadas a ese departamento tras haber sido desplazadas por la situación humanitaria en el Catatumbo.
Estas afirmaciones, además de falsas, estigmatizan a las víctimas y ponen en riesgo su vida, integridad y derechos fundamentales. Estas personas buscan rehacer su vida con dignidad, ejerciendo su derecho constitucional a residir en cualquier parte del país como lo establece la Constitución Política.
Frente a esta situación, aclaramos:
- Son 92 personas víctimas del conflicto armado, provenientes del Catatumbo, a quienes la Agencia Nacional de Tierras (ANT) adjudicó un predio en el Tolima para que puedan reubicarse bajo el acompañamiento de la Unidad de Víctimas, desarrollar sus proyectos productivos y reconstruir sus proyectos de vida.
- Entre estas personas se encuentran 13 firmantes del Acuerdo de Paz, quienes han sido acompañados por la ARN de manera permanente desde el inicio de la emergencia humanitaria, con el fin de garantizar la continuidad de sus procesos de reincorporación.
- Es falso que el proceso se haya hecho sin coordinación con la Alcaldía de Honda y la Gobernación del Tolima. Ambas han participado en las reuniones convocadas por el Gobierno Nacional para garantizar una llegada respetuosa, ordenada, digna y segura al territorio.
- Ninguna autoridad local puede restringir el derecho a la reubicación. El Gobierno Nacional mantiene su voluntad de avanzar en este proceso, con el respaldo pleno de la institucionalidad.
- No dejaremos solas a estas familias víctimas del conflicto armado ni a quienes le apostaron a la paz; tampoco renunciaremos al principio constitucional que les permite vivir en cualquier parte del territorio colombiano.
Hacemos un llamado a las autoridades locales y a la comunidad a acoger con solidaridad a estas familias que buscan reconstruir su vida. Invitamos a rechazar discursos que alimentan el odio, estigmatizan y perpetúan el conflicto armado.