La capital del país tiene actualmente 2.500 excombatientes en proceso de reintegración. Hoy, 50 personas que pertenecieron a las Farc, 40 a las autodefensas y 10 a otros grupos armados al margen de la ley, culminaron con éxito su paso por el proceso que lidera desde hace 13 años la Agencia Colombiana para la Reintegración (ACR).
Este viernes nueve de diciembre, 100 excombatientes de diferentes grupos armados ilegales culminaron su proceso de reintegración en Bogotá, cada uno con su toga y birrete, en una corta pero emotiva ceremonia, recibió el diploma que lo certifica oficialmente como una persona reintegrada.
El centro de convenciones de Compensar en Bogotá se vistió de gala para recibir a estos hombres y mujeres, quienes durante seis años y medio, en promedio, recibieron ayuda psicosocial, formación académica, se capacitaron técnica y laboralmente y prestaron un servicio social en su comunidad.
Para Joshua Mitrotti, director general de la ACR, "la culminación de la ruta de reintegración demuestra que nuestro enfoque humanista, no asistencialista, permite que las personas que dejan las armas puedan obtener, desarrollar o potenciar sus habilidades y competencias necesarias para superar su situación de vulnerabilidad y ejercer autónomamente su ciudadanía".
La coordinadora de la ACR en Bogotá, Catalina Arciniegas, resaltó la labor y el compromiso de estas personas que culminaron su proceso de reintegración, "este proceso que han hecho estas personas en la ruta de reintegración tiene un gran valor, ya que a través de un plan de trabajo y un proyecto de vida aportan de manera positiva a lo que estamos construyendo en esta ciudad", dijo.
De igual manera, Arciniegas reveló que en la ciudad de Bogotá hay 2.500 personas en proceso de reintegración, e invitó a todas las entidades del Distrito a vincularse con la política de reintegración.
A su turno, Diego Muñoz, delegado de la alta Consejería para los derechos de las Víctimas, la Paz y la Reconciliación del Distrito, calificó el proceso de reintegración que culminaron estos 100 excombatientes, como un acto de construcción de paz.
De otro lado, Omar Antonio Herrera, quien culminó su proceso de reintegración después de diez años de haberse desmovilizado del grupo armado del que hizo parte, agradeció a la ACR por brindarle a él y a los demás excombatientes la oportunidad de reconstruir sus vidas tras el paso por la guerra.
Los asistentes a este acto simbólico, disfrutaron del Performance Memoria: manos a la Obra' del grupo 'Costureras de la memoria, kilómetros de vida', que hace parte del Centro de Memoria de Paz y Reconciliación, una muestra artística que nace como una forma de resistencia contra el olvido y la indiferencia.