- Sobre un terreno sin pasto de 'La Loma', como se conoce el lugar donde está ubicada la cancha de arena con improvisados arcos, corre el balón. De un lado, 5 mujeres en proceso de reincorporación que hace 6 años iniciaron su tránsito a la legalidad en la vereda Pondores. Del otro, las rivales en el campo de juego son mujeres de la comunidad, pertenecientes a la etnia wayuu.
El día está nublado. Otra vez el invierno amenaza con obligar a suspender el partido. Sin embargo, como no cayó una gota de agua hasta el mediodía, el equipo de fútbol femenino de la vereda Pondores, sur de La Guajira, decide viajar hasta el resguardo Mayabangloma, donde jugarán frente a mujeres de la comunidad wayuu.
Sobre las 3:00 de la tarde por fin llegan todos y empieza el partido. Dos equipos femeninos, dos masculinos. El día sigue nublado, pero no llueve.
En un terreno sin pasto de 'La Loma', como se conoce el lugar donde está ubicada la cancha de arena con improvisados arcos, corre el balón.
De un lado, 5 mujeres excombatientes que hace 6 años iniciaron su tránsito a la legalidad en la vereda Pondores. El equipo lo completan dos jugadoras de la vereda Conejo, también jurisdicción del municipio de Fonseca. Las rivales en el campo de juego son mujeres de la etnia wayuu.
Es un corto campeonato, explica David Díaz, gestor deportivo en Pondores, no buscan ganadores ni premios, el objetivo es integrarse. Así también lo ha entendido Maritza Hernández Durán, jugadora del colectivo Pondores.
Hernández reconoce el poder del fútbol y su influencia en la sociedad. “Es el deporte más popular. A todos les gusta, por eso la mayoría de campeonatos que organizamos con la ARN (Agencia para la Reincorporación y la Normalización) tienen un objetivo: la reconciliación. Durante los partidos nos integramos, hay unidad. El fútbol es uno de los mejores medios para la reconciliación", señala Maritza Hernández.
La ARN, a través de sus acciones de Corresponsabilidad, gestiona con las administraciones locales el mejoramiento de escenarios deportivos, organización de eventos, entrega de dotación y contratación de gestores, como es el caso de David Díaz.
Un juego por la equidad
De pocas palabras, en medio de la entrevista, Maritza Hernández recuerda que, aunque por los años ya no corre igual y debe ser más paciente y estratégica en la cancha, toda la vida le ha encantado el fútbol. Incluso, de pequeña jugaba con los hombres, aunque eso le costara varios regaños de sus padres por ser un 'deporte para hombres'.
Ella no es la excepción. Cada 23 de mayo, desde el 2015, se celebra el Día del Fútbol Femenino con el objetivo de promover el deporte en niñas y mujeres. Desde que en 1894 se organizara el primer club de mujeres en Londres contrariando la posición de la Federación Inglesa de Fútbol, las mujeres han luchado por conquistar un espacio dominado por hombres.
Afortunadamente, el talento les ha permitido romper paradigmas, ganarle el partido a los estigmas y tener sus propios espacios: mundial, Champions, torneos locales. Por eso, desde hace algunos años es común leer en los medios de comunicación noticias como que, para la semifinal de la UEFA Champions League Femenina, el Barcelona rompió récords de asistentes a un partido de mujeres: 91.648 hinchas.
En Pondores, ellas están dando su propia lucha por la equidad trabajando por más espacios y eventos para mujeres. Es mucho lo que han ganado. En diciembre, por ejemplo, en el clásico torneo de fútbol 11 que organizan en Conejo, llamado 'Nacional vs. América', en honor a los dos grandes equipos del Fútbol Profesional Colombiano, fueron invitados dos equipos de mujeres.
Dairin Fernández, del equipo de excombatientes, cuenta que, aunque no pudo cumplir su sueño de ser futbolista profesional, “eran otros tiempos", anhela que la nueva generación no tenga tantos obstáculos para cumplir sus sueños.
“¿Cómo puede crecer el fútbol femenino? Con más inclusión, ayudando a todas esas niñas que sueñan con ser futbolistas", señala Fernández
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“En Conejo jugamos en una cancha de piso, pero también vamos a Distra, Barranca, Confuso, Mayabangloma. Allá casi siempre es de tierra la cancha", agrega Maritza Hernández.
Ahora, junto al líder deportivo, están gestionando la posibilidad de mejorar la cancha de tierra de Pondores y la construcción de una de microfutbol. “En el deporte tenemos que acabar con eso de que las mujeres no podemos. La Selección Femenina irá al mundial, con menos salario y apoyo que los hombres. La igualdad es la mejor forma para promover el futbol femenino", concluye Hernández.
Datos de interés
- A través de dotación y gestión ante las entidades municipales, la ARN trabaja por la reconciliación a través del deporte.