La Agencia para la Reincorporación y la Normalización (ARN) destacó la entrega del predio La Querendona en Circasia, Quindío, como un avance sustantivo para la consolidación de los procesos de reincorporación en el país. Esta acción se suma al esfuerzo nacional del Gobierno del Cambio, que a la fecha ha puesto a disposición de personas en proceso de reincorporación más de 17.000 hectáreas destinadas al fortalecimiento de proyectos productivos y a garantizar el arraigo territorial.
El predio, de 114 hectáreas, fue entregado por la Sociedad de Activos Especiales (SAE) a la Federación Nacional de Economías Comunes (FEDECOMUN), que reúne a 33 organizaciones de firmantes del Acuerdo de Paz. En este espacio se implementará un modelo integral que articula turismo comunitario, agricultura sostenible, ganadería ambiental y una granja demostrativa para la formación y el intercambio de saberes. Esta iniciativa permitirá diversificar economías rurales, fortalecer capacidades locales y consolidar una propuesta colectiva que impulsa reconciliación, productividad y cuidado del territorio.
La ARN acompañó esta entrega como parte de su compromiso con el éxito de los procesos de reincorporación. Para la Agencia, la asignación de tierras es esencial para garantizar la no repetición y el arraigo territorial. Al contar con espacios estables y productivos, las y los firmantes de paz avanzan en su tránsito hacia la vida civil, fortalecen su organización comunitaria y aportan al desarrollo sostenible de sus regiones.
FEDECOMUN y sus organizaciones pondrán en marcha en La Querendona un modelo que combina productividad y sostenibilidad ambiental, con el propósito de generar empleo, fortalecer el tejido social y dinamizar la economía del Eje Cafetero. Esta apuesta coincide con la visión del Gobierno del Cambio: promover economías rurales solidarias que impulsen la paz desde lo comunitario.
La ARN, como aliada estratégica de este proceso, continuará brindando acompañamiento técnico y organizativo a las comunidades en reincorporación, garantizando que cuenten con las condiciones necesarias para que sus proyectos avancen con estabilidad y proyección. “Nuestro propósito es que cada hectárea entregada se convierta en una oportunidad de futuro y en un motor de paz territorial”, reiteró la Agencia.
Con La Querendona, el país reafirma que la paz se construye desde lo local, mediante espacios seguros para la productividad y el fortalecimiento de la vida rural. Cada predio entregado fortalece la no repetición, consolida oportunidades económicas y profundiza la reconciliación en los territorios.